En una historia que continúa sorprendiendo al mundo, se ha revelado que la madre de los cuatro niños sobrevivientes del accidente aereo en la selva durante 40 días después de que se estrellara la avióneta en la que viajaban, estuvo viva durante cuatro días más después del trágico accidente.
Esta impactante revelación fue hecha por el padre de los menores, Manuel Ranoque, quien se reencontró con ellos en el hospital donde fueron llevados tras ser rescatados.
“Ellos mismos darán sus declaraciones. Lesly me aclara que la mamá estuvo viva durante cuatro días, y antes de morir les dijo, tal vez, váyanse”, declaró Ranoque a los medios colombianos.
La madre, Magdalena Mucutuy, viajó con sus cuatro hijos Soleiny, Tien, Lesly y Cristin el 1 de mayo pasado, cuando la avioneta en la que se estrelló en medio de la selva del sur del país.
Dos semanas después del accidente, los cuerpos sin vida de los tres adultos que también viajaban en la aeronave fueron encontrados por las autoridades de rescate, pero no se encontraron rastro de los menores.
Comenzó entonces una inédita operación de rescate que culminó este fin de semana, cuando los niños fueron hallados con vida, incluido un bebé que cumplió un año mientras estaban en la selva. Ranoque compartió detalles del reencuentro con sus hijos con la prensa colombiana. Todos ellos pertenecen a la comunidad indígena uitoto.
"No es fácil hacerles preguntas porque han pasado 40 días sin comer adecuadamente y sin dormir bien, así que no he tenido la oportunidad de obtener información. Espero que los niños se recuperen bien", dijo Ranoque.
Y añadió:
"Para nosotros, esto es una prueba de que Dios me está presentando para ver si tengo en él, y yo lo he demostrado con mis propias palabras".
"Mi mamá está muerta"
Poco a poco han surgido detalles sobre el tiempo que los niños pasaron en la selva y su increíble rescate, incluyendo las primeras palabras que dijeron cuando fueron encontrados.
Uno de los rescatistas, Nicolás Ordóñez Gómez, recordó el momento en que encontró a los niños.
"La hija mayor, Lesly, corrió hacia mí con el bebé en brazos y me dijo: 'Tengo hambre'", contó Gómez al canal público RTVC.
"Uno de los otros dos niños estaba acostado, se levantó y me dijo: 'Mi mamá está muerta'. Y luego me pidió pan con salchichas", agregó.
Los rescatistas se acercaron a los niños con palabras positivas, diciéndoles que eran amigos y que la familia los había enviado.
Las imágenes divulgadas por el ejército colombiano mostraron a los cuatro hermanos sumamente afectados por los rigores de la selva, con caras demacradas y cuerpos cubiertos de picadura de mosquitos.
Los miembros de la comunidad de los niños tenían la esperanza de que su conocimiento de las frutas y sus habilidades de supervivencia en la jungla les dieran una mejor oportunidad de sobrevivir.
Astrid Cáceres, directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), afirmó que afortunadamente, "la selva estaba en cosecha" y los niños podían alimentarse de las frutas que estaban disponibles en ese momento.
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