Armando Medina, un tatuador venezolano, perdió la vida tras sufrir las consecuencias devastadoras de beber alcohol adulterado durante un tour a la Isla Saona en República Dominicana. La pesadilla comenzó en octubre de 2020 cuando, junto a amigos, contrató un servicio de la agencia turística 'Ata Excursiones'.
Según el relato de los amigos, la empresa les proporcionó alcohol de cortesía durante el viaje, presentado en botellas que simulaban ser Ron legítimo del país. Aunque todo parecía normal en la isla, Armando Medina desarrolló extraños síntomas un día después, inicialmente atribuidos a la resaca. A su regreso a casa, los malestares aumentaron, llevándolo a buscar atención médica dos días después.
Ingresó al Centro Médico Elohim, donde sufrió convulsiones y cayó en coma, situación que persistió durante dos semanas. Los estudios médicos revelaron envenenamiento por metanol, consecuencia del consumo de alcohol adulterado. A pesar de tratamientos intensivos, incluyendo diálisis y lavados gástricos, se le diagnosticó daño cerebral y cuadriplejia.
La familia y amigos de Armando Medina hicieron pública la situación para buscar justicia y recaudar fondos para sus cuidados y rehabilitación. La debilitada salud del tatuador lo hizo vulnerable a una infección, y lamentablemente, falleció recientemente.
Ante esta tragedia, la familia emprendió acciones legales contra la agencia ATA Excursiones, denunciándola por suministrar alcohol adulterado. Las autoridades de República Dominicana cerraron la compañía y revocaron su licencia, pero hasta ahora, la agencia no ha asumido responsabilidad por los daños causados.
Amigos y familiares esperan que se acuse a los responsables de homicidio, buscando justicia para Armando Medina y estableciendo un precedente para evitar tragedias similares en el futuro.
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