Ante el repunte de casos de Covid-19 en diversos lugares del mundo, los expertos han vuelto a enfatizar la importancia del uso de cubrebocas en espacios públicos como medida preventiva para reducir la propagación del virus. En especial se ha dado atención a personas que pertenecen a grupos de riesgo, como aquellos que padecen enfermedades crónicas u otras condiciones médicas que los hacen más susceptibles a complicaciones por la infección.
El cardiólogo Jonathan Reiner ha sido uno de los especialistas que ha subrayado la necesidad de esta medida, llegando incluso a mencionar que esta recomendación alcance al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien se encuentra entre la población de alto riesgo debido a su edad, ya que cuenta con 80 años.
Reiner menciona que los individuos octogenarios son el grupo con mayor vulnerabilidad frente a las complicaciones asociadas con la infección por Covid-19. Hasta que las cifras de contagio no disminuyan significativamente, considera apropiado que el presidente Biden tome precauciones adicionales y utilice cubrebocas en lugares concurridos.
Además de las personas de edad avanzada, se ha señalado a otros grupos de alto riesgo que deben considerar el uso de cubrebocas en espacios públicos. Entre ellos se encuentran individuos con condiciones médicas como diabetes, cáncer, enfermedades crónicas del hígado, riñones o pulmonares, así como aquellos con trasplantes de órganos o células madre, VIH u otras inmunodeficiencias, y antecedentes de enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
El doctor Reiner también destaca que los cuidadores de personas pertenecientes a estos grupos de riesgo deben considerar el uso de cubrebocas en público como una medida adicional de precaución.
La aparición de variantes del virus, como la BA.2,86 de Covid-19, ha despertado la preocupación de la comunidad científica debido a sus múltiples mutaciones. Aunque su presencia se ha detectado en un número limitado de casos en todo el mundo, los expertos advierten que esta situación no es alarmante en términos de la evolución continua del virus.
En medio de este panorama, la recomendación persistente de usar cubrebocas en espacios públicos emerge como una estrategia fundamental para proteger a los individuos más vulnerables y para frenar la propagación del Covid-19 en la comunidad.
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