La semana pasada, la misión de la India para llegar a la luna, Chandrayaan-3 de la India logró una emocionante alunizaje en el polo sur de la roca, siguiendo los pasos de misiones anteriores del programa espacial indio. El hito ha sido ampliamente celebrado por el país y marcó un paso significativo hacia la ambición de convertirse en una potencia espacial.
Según informó El Universal, esta exitosa misión habría tenido un costo estimado de 75 millones de dólares. Este costo sorprendentemente bajo en comparación con otros proyectos de exploración espacial llamados la atención en la comunidad india, ya que es inferior al presupuesto de producciones cinematográficas de Hollywood como "Interestellar", que tuvo un presupuesto de alrededor de 160 millones de dólares, según IMDb.
En contraste, la misión lunar anterior de la India, Chandrayaan-2, tuvo un costo de más de 100 millones de dólares, ya que incluyó un orbitador en su conjunto. Para ponerlo en perspectiva internacional, la misión Maven de la NASA para viajar a Marte tuvo un costo estimado de 671 millones de dólares, mientras que la Mars Express de la Agencia Espacial Europea contó con un presupuesto de alrededor de 164 millones de dólares.
Detrás de esta exitosa hazaña está Narendra Modi, el primer ministro de la India, quien ha abrazado la ambición de convertir a su país en un líder espacial. Con el logro de la misión Chandrayaan-3, India se convierte en el cuarto país en aterrizar en la Luna, después de Estados Unidos, China y la Unión Soviética.
La misión Chandrayaan-3 no solo buscaba un alunizaje exitoso, sino también la distinción de ser el primer país en posicionarse en la parte más meridional de la Luna, una región donde los expertos creen que podrían existir reservas de agua en forma de hielo, especialmente en los cráteres que no reciben la luz del sol.
Durante los próximos catorce días terrestres, mientras la sonda se encuentra en la Luna (equivalente a medio día lunar), se llevarán a cabo experimentos científicos en su superficie y se analizará su terreno. Modi también tiene la visión de que las empresas privadas dedicadas a la industria espacial aumenten significativamente su participación en el mercado mundial de lanzamientos durante la próxima década.
El éxito de Chandrayaan-3 no solo marca un hito en la exploración lunar de la India, sino que también impulsa su posición en la carrera espacial global, dejando en claro que el país está decidido a dejar su huella en el vasto panorama del espacio.
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