En un año de celebración por su centenario, Disney ha unido fuerzas con algunas de las casas creativas más renombradas del mundo para honrar cien años de imaginación y magia. Uno de los colaboradores destacados es Swarovski, que ha demostrado su maestría a través de una pieza icónica y reconocible para los amantes del cine: la zapatilla de cristal de Cenicienta.
Con motivo de este importante aniversario, Disney se ha asociado con figuras destacadas de diversas industrias, como cine, música y moda, para piezas inspiradas en el mundo mágico de Disney. Estas colaboraciones tienen como objetivo apoyar a la organización Make-A-Wish, que cumple deseos de niños con enfermedades críticas.
Dentro de esta lista de colaboradores, Swarovski no podía faltar, con su nombre en el mundo de los cristales. La directora creativa de la marca, Giovana Engelbert, lidera el diseño de una réplica de la famosa zapatilla de cristal que se creó para la versión de acción en vivo de Cenicienta en 2015.
La zapatilla que Swarovski está creando es una pieza de arte impresionante, con 221 facetas que adornan toda su silueta. El cristal utilizado es la aureola boreal, conocido por su alto brillo y propiedades reflectantes, y ha sido tallado por los expertos artesanos de Swarovski en los Alpes Austriacos.
La creación de esta zapatilla ha sido una labor minuciosa que involucró a un equipo de ocho técnicos, quienes trabajaron durante más de 150 horas para lograr la perfección en esta pieza emblemática.
La colaboración entre Disney y Swarovski no es nueva, habiendo trabajado juntos anteriormente en 2005 para crear seis figuras de cristal que representan personajes icónicos como Mickey Mouse, Minnie Mouse, Pluto, el Pato Donald, Daysi y Goofy.
Pero las sorpresas aparecen, ya que se espera que a finales de este año se lance la colección "Disney100 x Swarovski". Esta entrega realizó joyería y elementos de decoración para el hogar con personajes queridos como Mickey Mouse, el Pato Donald y Minnie Mouse. Cada una de estas piezas captura la meticulosa atención al detalle y el refinado savoir faire que caracteriza a la casa Swarovski.
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