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Foto del escritorIsaac Quintal

Descubren un antiguo cráneo de 300 mil años que podría pertenecer a una nueva especie humana

Un equipo de arqueólogos de España, Reino Unido y China ha hecho un asombroso descubrimiento: un antiguo cráneo de hace 300 mil años que no se asemeja a ningún antepasado humano conocido hasta ahora, lo que sugiere la posibilidad de una nueva especie humana.

Craneo antepasados
Los restos encontrados asemejan a los de un homo sappiens

El hallazgo ha sido publicado en el Journal of Human Evolution el 31 de julio, y podría redefinir la comprensión de la evolución humana en esa época.


El cráneo fue encontrado en la región de Hualongdong, en el este de China, junto con otros 15 especímenes del Pleistoceno medio tardío, un período crucial para la evolución de los homínidos. El descubrimiento ha llevado a los arqueólogos a considerar que este fósil podría representar una nueva rama en el árbol genealógico humano.


Lo más notable es que la mandíbula o maxilar inferior encontrada es inusual y no se ajusta a ningún grupo taxonómico conocido hasta ahora. Comparaciones con otros fósiles de homínidos del Pleistoceno y de humanos modernos revelaron que el cráneo tiene características de ambos. Aunque comparte algunas similitudes con el Homo sapiens, como la forma de la mandíbula, también presenta características de los denisovanos, una rama de la evolución humana.


La falta de una verdadera barbilla en el cráneo, una característica típicamente asociada con los humanos modernos, también ha intrigado a los investigadores. María Martinón-Torres, autora del estudio y directora del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana en España, comentó que el cráneo parece anticipar rasgos característicos del Homo sapiens, a pesar de no presentar una barbilla completa.


Este hallazgo está cambiando la perspectiva sobre la humanidad en el Pleistoceno medio tardío y plantea la posibilidad de que características propias de los humanos modernos podrían haber aparecido antes de lo que se creía en Asia oriental. Aunque la nueva clasificación de este cráneo carece de un nombre definitivo, su descubrimiento marca un paso importante en la comprensión de nuestra historia evolutiva plantea y preguntas fascinantes sobre la diversidad de las especies humanas en el pasado.

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