La cantante Britney Spears ha revelado un impactante episodio de su vida en su nuevo libro, "The Woman in Me", en el que confiesa que estuvo embarazada de Justin Timberlake durante su relación con el famoso cantante y actor. Spears, actualmente con 41 años, relató cómo quedó embarazada a la edad de 18 años, pero su pareja en ese momento, Justin Timberlake, no estaba preparada para ser padre y la convenció de abortar.
"Fue una decisión muy difícil", escribió Spears en su libro.
"Pero Justin definitivamente no estaba contento con el embarazo. Dijo que no estábamos preparados y que no era el momento adecuado".
La revelación de Spears sobre este momento crítico en su vida ha generado una reacción significativa en las redes sociales. Muchos usuarios han expresado su apoyo a la cantante y han criticado a Timberlake por su comportamiento.
"Britney Spears ha sido tan valiente al compartir su historia", escribió una usuaria de Twitter. "Espero que su historia ayude a otras mujeres que han pasado por lo mismo."
"Justin Timberlake debería disculparse con Britney Spears", expresó otro usuario. "Su comportamiento fue inaceptable."
Hasta el momento, Justin Timberlake no ha respondido públicamente a las declaraciones de Spears.
Las declaraciones sobre su embarazo con Justin Timberlake son un testimonio del dolor y la vulnerabilidad que Spears ha experimentado a lo largo de su vida. Sin embargo, también son un recordatorio de su fuerza y determinación para compartir su historia y recuperar el control de su vida.
Britney Spears reveló el motivo detrás de su rapado en 2007 y las secuelas de su tutela
Tras 16 años de misterio, la icónica cantante de pop, Britney Spears, finalmente ha compartido las razones que la llevaron a raparse la cabeza en 2007, un evento que marcó un momento crítico en su vida. En un extracto de sus próximas memorias tituladas "The Woman in Me", Britney Spears aborda el motivo detrás de esta drástica decisión que dejó perplejos a sus fanáticos en todo el mundo.
En sus memorias, Britney, de 41 años, se sinceró acerca de la presión y el escrutinio que experimentó desde una edad temprana.
"Me había observado mucho mientras crecía. Me habían mirado de arriba abajo, la gente me había dicho lo que pensaban de mi cuerpo desde que era una adolescente. Raparme la cabeza y comportarme mal eran mis formas de contraatacar", reveló la estrella.
La controvertida decisión de raparse la cabeza ocurrió en un período tumultuoso de la vida de Spears en 2007, mientras entraba y salía de rehabilitación. Durante ese tiempo, la cantante visitó una estética en Tarzana, California, propiedad de Esther Tognozzi, donde pidió que le quitaran las extensiones de cabello que le estaban causando molestias. La dueña del salón se negó a hacerlo, lo que llevó a Britney a tomar una máquina de afeitar y raparse ella misma mientras los paparazzi fotografiaban la escena a través de las ventanas del salón.
Pocos días después, la artista fue capturada en imágenes atacando un automóvil de un paparazzi con un paraguas, lo que hizo que la atención de los medios se centrara en su vida personal.
Estos incidentes ocurrieron mientras Britney enfrentaba una batalla de divorcio y custodia por sus hijos con su ex esposo, Kevin Federline, lo que la convirtió en blanco constante para las revistas sensacionalistas de la época.
Sin embargo, el desafío más significativo en la vida de Britney comenzó cuando, en 2008, su padre, Jamie Spears, asumió el control de sus asuntos personales, médicos y financieros, limitando su voz y su independencia. La cantante compartió en sus memorias que se le "hicieron comprender que esos días ya habían terminado" y que debían seguir reglas estrictas, incluyendo dejarse crecer el cabello y tomar medicamentos según lo ordenado.
La relación de tutela duró más de una década y tuvo un impacto significativo en la vida de Britney Spears, a quien consideró más como una entidad que como una persona. La estrella del pop describió cómo la tutela la privó de su libertad y la convirtió en una especie de niña.
"La mujer que hay en mí estuvo reprimida durante mucho tiempo. Querían que fuera salvaje en el escenario... y que fuera un robot el resto del tiempo", escribió Britney.
En 2021, después de años de batallas legales y después de testificar públicamente contra su tutela, un juez de Los Ángeles finalmente sustituyó a Jamie Spears como tutor legal de la cantante antes de revocar por completo el acuerdo.
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